8. Falta de entusiasmo
Nada logra emocionarte, ni una buena nota. El profesor anuncia que la clase siguiente va a explicar un tema fundamental como derivadas y ves como tus compañeros se entusiasman, cómo sonríen de felicidad, están ansiosos por aprender, como si se fuera a estrenar una nueva película de Star Wars. Pero a ti no se te mueve un pelo. No te interesan para nada los temas que vienen en las próximas clases, ni en los próximos años.