Descripción
Para un estudiante, cursar una asignatura de economía experimental es un poco como estar invitado a comer en casa de un caníbal. Puede ocurrir que sea simplemente un comensal, que sea parte de la cena o que sea ambas cosas a la vez. En un curso de laboratorio de ciencias naturales, los estudiantes tienen que mezclar sustancias químicas que huelen mal o andar tirando de poleas o diseccionar una rana, pero siempre son ellos los que experimentan y nunca son los sujetos del experimento.
En los experimentos que se realizan en esta clase, los estudiantes serán a la vez los participantes en los mercados y los observadores científicos que tratan de entender los resultados. Es difícil imaginar que un químico pueda ponerse en el lugar de una molécula de hidrógeno. Es improbable que un biólogo que estudia la conducta animal sepa lo que sienten los patos.
El estudiante de este curso es más afortunado. Estudiará la conducta y las interacciones de la gente en situaciones económicas. Y siendo uno de estos agentes económicos que interactúan, podrá experimentar de primera mano los problemas con los que se encuentra uno de ellos. Sospechamos que su experiencia como participante en el experimento le permitirá comprender los principios económicos casi tanto como su análisis como observador del experimento.
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